La ubicación del hotel es excelente, a solo 100 metros de un telecabina que te lleva a pistas. Las habitaciones son cómodas y calientes, con vistas increíbles al valle, especialmente si puedes alojarte en una con balcón.

El hotel se siente anticuado. la decoración es de otro tiempo, y algunas habitaciones tienen detalles dañados, como clavos expuestos en las paredes. La calefacción no tiene un control efectivo, haciendo que algunas áreas del hotel resulten demasiado calientes. La limpieza es adecuada, pero los suelos pueden estar pegajosos o resbaladizos, lo que es un poco preocupante. Anuncian piscina, jacuzzi y hammam, pero los últimos dos estaban fuera de servicio y la piscina es bastante pequeña.

Una joya en las montañas

La ubicación del hotel es ideal, a solo unos minutos del telecabina. El servicio en el restaurante fue excepcional, con platos bien preparados y un ambiente acogedor.

El hotel en sí necesita una renovación. Las instalaciones son algo viejas y la limpieza podría mejorar. La calefacción era demasiado intensa en todo el hotel.

La cena fue un verdadero festín con platos de inspiración americana, aunque el menú tenía sus limitaciones. Además, el encanto del salón con chimenea hizo que las cenas fueran más que disfrutar de una buena comida. era una experiencia. La atención del personal, especialmente de la camarera jovencita, también le dio un toque especial a nuestra estancia.

Ten en cuenta que necesitas un plan de comidas, como desayuno y cena, que no estaba claro al hacer la reserva. Aunque no estaba en la web, ¡la cena por €40 por persona fue un poco sorpresiva! Pero, con la chimenea encendida, ¡pudimos perdonar ese pequeño detalle!

buenas vistas pero desayuno limitado

Las vistas desde la habitación eran fantásticas, ofreciendo un paisaje que quita el aliento cada mañana. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y hacer que nuestra estancia fuera agradable. Además, la ubicación permitía un acceso rápido a las pistes, ideal para los amantes del esquí.

El desayuno podría ser más variado.

Las vistas desde la habitación son realmente espectaculares y la terraza es perfecta para disfrutar del sol. Sin embargo, la habitación podría beneficiarse de una renovación, ya que se notan algunos detalles antiguos. Aunque el personal es amable y atento, el desayuno dejó un poco que desear en cuanto a variedad. En general, es un lugar adecuado para una escapada familiar.

vistas impresionantes, acceso directo a las pistas, excelente ubicación

La limpieza es deficiente, las habitaciones son pequeñas y los muebles están envejecidos. Wifi limitado solo en el bar y el spa es inservible. ¡No se puede aceptar la falta de mantenimiento en un lugar que cobra tanto!!!

La atención del personal fue muy amable.

Las vistas desde la habitación son espectaculares, pero la conexión wifi es limitada.

Recepción extraordinaria, entorno acogedor, vistas impresionantes – una experiencia inolvidable y cálida.

Las vistas desde la habitación son espectaculares, especialmente al amanecer. La habitación era muy cómoda y el ambiente familiar del hotel lo hacía sentir acogedor. Disfruté del desayuno, que aunque podría mejorar en variedad, siempre fue agradable comenzar el día con esas vistas.

El desayuno podría ser más variado.

volvería

Las vistas desde la habitación son brutales, con un balcón que da al valle. La habitación era comoda, con baño privado y ducha. La calefacción funcionaba bien y todo estaba muy limpio. El hotel tiene piscina climatizada y un solarium ideal para relajarse. El trato de la camarera fue muy amable.

La habitación tenía vistas espectaculares, pero estaba bastante anticuada.

las vistas desde la terraza del restaurante son brutales, ideal para relajarte con tu pareja. la habitación era cómoda y el trato del personal super amable, siempre atentos a lo que necesitábamos. el ambiente en general es bien familiar y acogedor, perfecto para desconectar. además, el spa estaba chido, aunque no tuvimos tiempo de usarlo. definitivamente un lugar p'asear un finde romántico.

la cena fue cara y el desayuno no tenía mucha variedad.

Increíbles vistas y ambiente familiar

Las vistas desde la habitación eran espectaculares, especialmente al amanecer, con el valle y las montañas de fondo. La habitación era muy cómoda y el ambiente familiar del hotel lo hacía sentir acogedor. Me encantó disfrutar en la terraza del restaurante bajo el sol, aunque el desayuno podría mejorar un poco en la variedad. Sin embargo, la ubicación es perfecta para acceder rápidamente a los remontes de pistas, lo que hace que sea ideal para los amantes del esquí.

La vista desde la habitación era impresionante, ideal para disfrutar del amanecer. Habitaciones bien cómodas y el personal súper amable. El desayuno podría ser más variado, pero la atención compensa eso. Un lugar perfecto para escapar con la familia.